Hoy,
un martes de esos martes tan vacíos,
te busco y te rebusco en la memoria,
y retorno a las calles que anduvimos
para encontrar la sombra de tu sombra.
Necesito tu voz como un anclaje
y llenar cada espacio con tu aliento;
mas sólo hallo el helor de la ausencia
que se adentra hasta el fondo de mis huesos.
Tengo frío,
la soledad me invade;
desasistido el hueco de mi abrazo…
puesto que ya no estás para abrazarte.
Y vuelvo a los recuerdos…
y a esa plaza
donde nos cobijaron los naranjos,
y me estrangulo el llanto en la garganta
y conjugo los verbos en pasado.
Aún no aprendo a vivir sin tu presencia,
aún me duele tu ausencia en el costado;
se han perdido del cielo las estrellas
y sólo tengo aire entre las manos.
Mas no renuncio a ti, ni a lo que fuiste:
lluvia para mi surco, grano de trigo,
tierna hogaza de pan, luz de mi noche
abriéndole senderos a la aurora,
partitura en mis puntos cardinales,
columna vertebral de mis deseos,
fuego incendiario, que alentaba
mi carne estremecida.
Tu nombre está en mis labios,
anudo tu silencio a mis palabras
y sigo por las calles caminando,
poniéndole andamiaje a la esperanza,
por si al doblar la esquina de la ausencia
consiguiera encontrarte, de repente…
aunque sólo me encuentre con la nada.
Carmen Aguirre
Poema publicado en el nº 10
de la Colección "Variaciones"
16 de Febreo de 2007
miércoles, 31 de octubre de 2007
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2 comentarios:
Cuanto mas te leo mas me haces sentir feliz , consigues llegar a mi fibra sensible aunque eso a ti poco te cuesta. . . ¡eres tan grande!Con este poema me has hecho revivir ´momentos mios tan tan guardados. . . me has hecho llorar y no siempre mi querida amiga se llora de tristeza.
gracias te quiero
te creia una amistad, PERO TODO EL MAL SE VUELVE, SOBRE EL QUE LO DESEA
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