¡Entren y pasen! Sean bienvenidos al etéreo mundo de la poesía. No os quedéis en la entrada... ¡pasad!. Abierta está la puerta del diálogo. No seáis tímidos... ¡Pasad!
Malagueña por sus cuatro costados, nació un 26 de septiembre en la, denominada por Aleixandre: "Ciudad del Paraíso".
Lectora incansable y amante de la lírica desde la infancia, ha hecho de la poesía su mundo.
Pertenece a distintas asociaciones literarias y es fundadora del "Colectivo Noray". Los poemas de Carmen han visto la luz en diferentes antologías y en revistas del género. Su gran afición al flamenco, la lleva a escribir letras para el mismo, habiendo conseguido algunos premios en esta modalidad. Actualmente dirige y edita la publicación poética "Variaciones".
Hoy ya es 7 del 7 del 007... ¡Qué número tan mágico y plagado de simbología! El 7 es el signo cabalístico de la luz. 7: son los días de la semana. 7: las notas musicales. 7: los colores del arco iris. 7: las artes. 7: los sabios de Grecia. 7: las Maravillas del Mundo. 7: los reyes de Roma. 7: las virtudes teologales. 7: los dones del Espíritu Santo. 7: los sacramentos... Pero lo que de verdad a mí me gustaría en este 7 del 7 del 007: es cruzar los 7 mares y llegar al séptimo cielo en compañía del agente 007.
Carmen Aguirre
AL FILO
Según el diccionario, la palabra "filo" puede ser el borde agudo de un instrumento cortante, o bien la línea que divide una cosa en dos partes iguales. Referido a los sistemas filogenéticos, "filo", sería una serie de organismos que se consideran originados unos de otros a partir de una misma forma fundamental. Por otra parte, ateniéndome al alfabeto griego, "filo" significaría el primer elemento de voces compuestas con el sentido de amante, amigo.
Pues, bien, todas las definiciones me valen. ¿Quién no se ha cortado alguna vez con el filo de un cuchillo? ¿Quienes de nosotros no ha estado al filo del abismo, o al filo de la suerte o de la muerte? ¡Nos quedamos siempre al filo de tantas y tantas cosas!... Quizás, por eso mismo, he querido titular este blog "al filo de la poesía", con la intención de que os acerquéis a ella, al filo del amanecer o al de la media noche. A la hora y tiempo que vosotros queráis compartir el supremo don de la palabra escrita.
No os quedeis al filo. ¡Entrad!
Carmen Aguirre
RUDYARD KIPLING
Hablando, al filo de la madrugada, con mi querido amigo Miguel Ángel del Pozo, me comentó sobre el gran escritor y poeta Rudyard Kipling, premio Nobel de literatura en 1907, que dedicó su vida y sus escritos a profundizar en la condición del hombre. Me dijo Miguel, que él tenía como Biblia personal el poema IF... , de dicho autor, y enseguida me lo envió por un correo electrónico. Desde aquí le doy las gracias a mi amigo, por ser tan buen amigo y descubrirme este maravilloso poema que, a continuación, os transcribo; aunque, por motivos de diseño de la página, no guarde su estructura original.
IF...
Si guardas en tu puesto la cabeza tranquila, cuando todo a tu lado es cabeza perdida. Si tienes en ti mismo una fe que te niegan y no desprecias nunca las dudas que ellos tengan.
Si esperas en tu puesto, sin fatiga en la espera. Si engañado, no engañas. Si no buscas más odio, que el odio que te tengan. Si eres bueno, y no finges ser mejor de lo que eres.
Si al hablar no exageras, lo que sabes y quieres. Si sueñas y los sueños no te hacen su esclavo. Si piensas y rechazas l o que piensas en vano. Si alcanzas el TRIUNFO ó llega tu DERROTA, y a los dos impostores l es tratas de igual forma.
Si logras que se sepa la verdad que has hablado, a pesar del sofisma del Orbe encanallado. Si vuelves al comienzo de la obra perdida, aunque esta obra sea la de toda tu vida.
Si arriesgas de un golpe y lleno de alegría, tus ganancias de siempre a la suerte de un día, y pierdes, y te lanzas de nuevo a la pelea, sin decir nada a nadie lo que eres, ni lo que eras.
Si logras que los nervios y el corazón te asistan, aún después de su fuga, en tu cuerpo en fatiga, y se agarren contigo, cuando no quede nada, porque tú lo deseas, y lo quieres y mandas.
Si hablas con el pueblo y guardas la virtud. Si marchas junto a Reyes con tu paso y tu luz. Si nadie que te hiera, llega a hacerte la herida. Si todos te reclaman, y ni uno te precisa.
Si llenas el minuto inolvidable y cierto, de sesenta segundos, que te llevan al cielo… todo lo de esta Tierra será de tu dominio, y mucho más aún: ¡Serás HOMBRE, hijo mío !
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